Ante la situación de despidos masivos y arbitrarios denunciados recientemente por la ANEF, el Colegio de Periodistas de Chile comparte esta preocupación y confirma que esta realidad también está afectando a trabajadores/as de profesión periodista, desvinculados/as en diversas reparticiones públicas, tanto a nivel nacional como en regiones, y a quienes no se les podría catalogar como personas de “confianza” del gobierno anterior.
Muchos de ellos/as han trabajado por años en algunas instituciones del Estado, cumpliendo a cabalidad y con la mayor entrega profesional las tareas propias de sus puestos, logrados, muchas veces, a través de concurso público.
El Colegio de Periodistas comprende que los nuevos gobiernos requieren, para su instalación y según sus necesidades, profesionales de confianza para algunos cargos. Así se lo hemos expresados a las autoridades. Sin embargo, también insistimos en que no es posible rotular como “cargo de confianza” para justificar de este modo desvinculaciones del sector público, que nos parecen improcedentes e injustas.
Confiamos que esta situación no continúe, en beneficio de los/as trabajadores/as públicos y de sus familias, ya que la incertidumbre e inseguridad que se ha generado provoca situaciones que vulneran gravemente el bienestar y el derecho de toda persona a conservar su trabajo.
El Colegio de Periodistas ha solicitado a los presidentes regionales de esta organización realizar un balance de quienes han sufrido estas medidas arbitrarias, para apelar ante las autoridades correspondientes e interceder por una pronta solución.
Entregamos todo nuestro respaldo a los/as dirigentes de la ANEF, quienes hacen verdaderos esfuerzos por proteger a trabajadoras y trabajadores del sector público, no sólo en materia de despidos, sino en su lucha por reivindicar el empleo “decente en el Estado con estabilidad laboral, fortalecer las plantas para terminar con la precariedad del personal a honorario y contrata”.
Como Colegio de Periodistas, reiteramos que sólo la unión de nuestro gremio permitirá visibilizar abusos laborales como el que hoy denunciamos. No nos detendremos en nuestra tarea de proteger y exigir el respeto a los derechos laborales de periodistas, tanto en el sector público como privado, porque estimamos que no es posible que continúe el nivel de precarización que afecta a nuestros/as colegas.